Para conducir un coche de la marca del Cavallino Rampante, hace falta algo más que dinero. A diferencia de otros fabricantes, que buscan aumentar al máximo sus ventas cada año para contentar a los inversores, Ferrari logra sus objetivos utilizando la vía de la exclusividad, como también lo hacen marcas como Hermès o Louis Vuitton.En las últimas décadas, han surgido unos pocos fabricantes de superderportivos que han creado algunos de los coches más rápidos del mundo. Sin embargo, la competencia jamás le quitará el sueño a Ferrari. Y es que, ser parte de la historia de la automoción, con una identidad inseparable de competiciones como la Fórmula 1 o las 24 Horas de Le Mans es algo que no se puede comprar con dinero, ni con mejores ingenieros. Aunque existan deportivos más rápidos, Ferrari les lleva 80 años de ventaja.A diferencia de cualquier otra marca de coches, no es el cliente el que elige a Ferrari. Es la propia marca quien decide en última instancia si le conviene o no que uno de los vehículos de la Scudería acabe en manos del interesado. En estas líneas vamos a describir lo que sabemos sobre el proceso de selección que hace Ferrari, la marca de coches más deseada de todos los tiempos que muchos ricos no pueden comprar.

Antecedentes del cliente

Tener riqueza no siempre significa tener clase. Por eso, si te interesa tener en tu garaje uno de los coches de la fábrica de Maranello, debes saber de antemano que te van a realizar una investigación exhaustiva. Si quieres comprar un Ferrari nuevo, es obvio que tienes que tener dinero. Sin embargo, la exclusiva marca italiana quiere saber antes de darte las llaves qué haces exactamente para ganar dinero. Sin duda, es una primera línea de cortafuegos para evitar que una de sus creaciones acabe en manos de nuevos ricos, estafadores y organizaciones criminales. A propósito de los nuevos ricos, ¿has pensado alguna vez por qué los gurús de las criptomonedas están obsesionados con los ‘Lambo’? Efectivamente, es porque no son candidatos aptos para comprar un Ferrari nuevo.

Perfil del cliente

Cumplir los requisitos anteriores no te garantiza poder reservar hora en Maranello para configurar tu nuevo coche de lujo. Al igual que en las mejores discotecas de tu ciudad, Ferrari tiene derecho de admisión. Esto significa que pueden aceptar o descartar determinados perfiles de cliente, independientemente de que pasen ese primer corte.De esto, obviamente, sabemos muy poco, ya que Ferrari no va a publicar sus requisitos en ningún sitio. Se intuye que la marca prefiere clientes con un perfil de edad que supere los 40 años. Además, busca también personas que tengan un buen historial de conducción, que no hagan el cafre al volante.Más allá de esto, lo que vamos a encontrar van a ser leyendas urbanas y especulaciones sin fundamento. ¿Prefiere Ferrari vender coches a hombres que a mujeres? Teniendo otros factores mucho más determinantes para acordar la venta, esto último parece más un rumor que busca dañar a la marca, que un hecho que se pueda demostrar de alguna forma.

¿Tiene Ferrari una lista negra de clientes?

Una vez más, volvemos a los rumores. Se dice que hay celebridades que todos conocemos que no podrán comprarse jamás un Ferrari nuevo. Aunque tampoco hay mucha información sobre esto, hay varios motivos por los que la marca italiana podría evitar venderle sus coches a determinadas celebrities.Uno de los motivos puede ser tan simple como haber incumplido algunas de las normas que establece el fabricante —las veremos un poco más adelante—. En otras, Ferrari se podría negar a vender sus coches a clientes que han tenido algún tipo de escándalo, o que utilizan sus vehículos únicamente para fardar y no los mantienen el tiempo suficiente. Este último sería el caso del boxeador Floyd Mayweather

Los modelos exclusivos son para sus clientes más fieles

La relación entre un cliente y Ferrari se establece desde los cimientos. Si acceden a venderte un coche, tendrás que elegir alguno de los modelos más básicos que tienen a la venta. Conforme vayan pasando los años, si cuidas bien el coche y respetas el código que defiende la marca, podrás acceder a modelos más interesantes.En el caso más extremo, tenemos los coches que tienen tiradas muy limitadas, que son los más exclusivos del Cavallino Rampante, como lo fue en su día el Ferrari Enzo. En teoría, en estos casos es la propia marca la que se pone en contacto con los clientes que son aptos para adquirir uno. Y aquí también hay mucha rumorología, pues se dice por Internet que estos modelos son un poco un arma de doble filo. ¿Te pone Ferrari en la lista negra si te accidentas con uno de estos exclusivos vehículos después de estar haciendo una conducción temeraria? Algo similar se dice que le pudo pasar a Nicolas Cage, actor con el que la marca aparentemente no quiere volver a hacer negocios después de que se deshiciera precisamente de su Enzo.

Tu Ferrari no es tan tuyo

Si quieres un Ferrari, tienes que aceptar al milímetro las condiciones que establece la marca. Decimos esto porque, a pesar de que tendrás que desembolsar una gran cantidad de dinero, pagar costosos mantenimientos y una enorme póliza de seguro, el coche seguirá teniendo ciertos sentimientos hacia Maranello.

Nada de modificaciones

Si te gusta hacer experimentos como al niño loco de Toy Story, olvídate de comprar un Ferrari. Los únicos que pueden tocar los coches de la Scudería son los técnicos de Maranello. Por eso, Ferrari se gasta mucho dinero en asegurarse de que sus clientes respetan al máximo los contratos que firman.Si sigues un poco de la prensa del motor, te harás una idea de lo que estamos comentando. Casi todos los meses hay noticias de una persona que ha modificado uno de estos coches y Ferrari responde con la intención de tomar acciones legales.Un caso muy icónico de hace unos años fue el que protagonizó el productor de música trance Deadmau5. Con mucha guasa, el DJ viniló su Ferrari 458 Italia con un diseño hortera del Nyan Cat, un popular meme de Internet. Lo promocionó en redes sociales como su ‘Purrari’. Los abogados de Ferrari se pusieron en contacto con el artista con la amenaza de tomar acciones legales. La historia acabó relativamente bien. El DJ retiró el vinilo, aunque soltó algún que otro insulto a los de la marca de Maranello. Vamos, que es posible que no le vuelvan a vender uno.Por otro lado, hay modificaciones incluso más flagrantes con las que Ferrari está dispuesta a meterse en juicios importantes. Por ejemplo, comprar un Ferrari para quitarle su motor de 12 cilindros y meterle la mecánica de un Tesla puede ser muy viral hoy, pero un billete asegurado para calentar el ambiente en Maranello.

No puedes vender sin permiso

¿Vender? ¿Qué es eso de vender? Si te cansas de tu Ferrari, cuidado con lo que haces. Si quieres quitártelo de encima el primer año, tienes que informar sí o sí a la marca. A los italianos no les gusta que sus clientes especulen con sus vehículos de lujo. Por eso, el primer comprador en el que hay que pensar es el propio concesionario que nos lo ha vendido.Si ya hablamos de los coches más exclusivos de Ferrari, la cosa se pone más seria. Si vendes de espalda a la marca como hizo Nicolas Cage, tendrás problemas. Esto no significa que vender un Ferrari te convierta en persona non grata para ellos. Hay casos de necesidad incluso de personas que forman parte del ADN de la marca italiana, como el de Michael Schumacher, que su familia ha tenido que vender algunos vehículos exclusivos para poder pagar los tratamientos médicos de la leyenda de la F1.

Tampoco puedes aprovecharte de la marca Ferrari

Esta última máxima es una completa lección de lo que es hacer buen marketing y defender la reputación de una marca cueste lo que cueste. Ferrari es una marca que aúna tantos valores positivos, que resulta difícil no querer contagiarse de ellos.A Ferrari no le importa que una persona exitosa se nutra de sus valores. Lo que no está dispuesta a aceptar es que otra marca se aproveche de su insignia. Por eso, otra de las líneas rojas está dentro del campo de la propiedad intelectual. No puedes utilizar un Ferrari para promocionar una marca distinta sin llegar previamente a un acuerdo con ellos.Seguro que más de un director de arte se ha llevado una sorpresa con esto. En teoría, si quieres promocionar una marca de lujo y quieres poner de fondo un magnífico Ferrari, puedes buscarte un problema con sus abogados.Un tanto de lo mismo ocurre si se te ocurre usar uno de estos coches rojos para crear contenido fuera de tono —sí, hablamos de fotos sugerentes para Instagram o incluso contenido para adultos que se distribuye en OnlyFans—. En estos casos, Ferrari también puede emprender acciones legales al considerar que las publicaciones hacen daño a su propia reputación. Este también puede ser el motivo por el que Ferrari no es muy propenso a vender sus exclusivos vehículos a influencers y algunas celebrities que han saltado a la fama gracias a las redes sociales.Esperamos que este repaso te haya servido para diferenciar lo que Ferrari busca en sus clientes. Sobre esta marca se han generado innumerables mitos, muchos de ellos totalmente imposibles de contrastar, pues sería absurdo que una firma de lujo de este calibre mostrara trasparencia en este aspecto.

Si este artículo te ha parecido interesante y quieres seguir leyendo sobre el Cavallino Rampante, no te pierdas las dos recomendaciones que te dejamos a continuación. ¿Te has preguntado alguna vez por qué el color de Ferrari es rojo? Si ya sabes la respuesta, te invitamos entonces a echar un ojo a esta otra entrada sobre la historia del logo de Ferrari.

Daniel Marín