La dirección asistida: ese elemento que no lleva tanto entre nosotros y sin el que no sabemos conducir
Probablemente muchos de nosotros hemos tenido alguna vez en nuestra vida un coche de segunda mano bastante viejo, que para empezar a conducir por nuestra ciudad nos servía. Sin embargo, en cuanto nos subimos a un coche más moderno en seguida notamos que la conducción es mucho más cómoda. Esto es algo normal ya que la tecnología de los coches se ha seguido desarrollando y ha ido avanzando con el paso del tiempo. Algo que probablemente agradezcas que tenga un coche, sobre todo si has estado mucho tiempo conduciendo coches viejos, es que tenga dirección asistida. La dirección asistida hace que la conducción sea más cómoda, aquí te explicamos qué es.
¿Qué es la dirección asistida?
La dirección asistida es un sistema con el cual muchos coches cuentan hoy en día que permite maniobrar con el volante sin tener que aplicar mucha fuerza para ello. Con un ligero movimiento de muñeca podemos girar el volante y de esta manera cambiar de dirección. Es uno de los sistemas de seguridad más importantes de nuestro coche.
¿Qué partes tiene el sistema de dirección asistida?
El sistema de dirección asistida cuenta con varios componentes:
- Columna de dirección: es la barra que conecta el volante con los otros componentes del sistema de dirección.
- Bomba de dirección: se encarga de mover el aceite por todo el circuito para que el conductor pueda maniobrar y girar el volante con facilidad.
- Válvula de control: Es la que permite llevar el aceite de un lado a otro, según hacia dónde giremos el volante.
- Depósito de aceite: es el lugar donde se almacena el aceite no utilizado.
- Unidad de control: gestiona la dirección según la fuerza que aplique el conductor sobre el volante, también influye la velocidad del vehículo y la posición de las ruedas.
Tipos de dirección asistida
Dentro de la dirección asistida podemos encontrar tres tipos:
Dirección asistida hidráulica: Es la primera de todas en implementarse en los coches. Consiste en una bomba conectada al motor mediante poleas. Esta bomba junto con un actuador generan energía y asisten al movimientos de las ruedas según el giro del volante.
Dirección asistida electro-hidráulica: Este se sistema funciona mediante una bomba hidráulica que se acciona gracias a un motor eléctrico que se alimenta a través de la batería del propio vehículo. Como no está conectada al motor directamente como la hidráulica, se activa solo cuando es necesario, cuando el conductor mueve el volante, por lo que también ahorra mucho combustible.
Dirección asistida eléctrica: Se utiliza un motor eléctrico para brindar la asistencia. El motor se coloca en la columna de dirección. Es la más actual y tiene menos componentes que las anteriores lo que hace que se reduzca el peso total del coche. Este tipo de dirección hace que la conducción sea más suave. Aun así, también es la que más problema supone si se avería ya que la reparación es bastante complicada.
Ventajas de la dirección asistida
Los coches con dirección asistida cuentan con más ventajas en cuanto a seguridad se refiere respecto a otros coches. ¿Por qué decimos esto? Porque la dirección asistida nos permite reaccionar mejor si por ejemplo tenemos que hacer algún movimiento brusco para evitar un obstáculo o un accidente. En los coches donde no hay dirección asistida es más complicado, pues el volante está duro y hay que hacer mucha fuerza para poder girarlo y cambiar de dirección.
No solo existe esa ventaja, si has conducido un coche que no tiene dirección asistida, ya sabrás la odisea que supone aparcar, sobre todo si tienes que hacer muchas maniobras. No será la primera vez que alguien ha acabado sudando debido al esfuerzo que ha tenido que hacer para poder realizar las maniobras necesarias para aparcar.
¿Por qué algunas veces el volante se pone duro?
Puede que alguna vez hayas oído que el volante del coche se le ha puesto rígido a algún conocido o que incluso ahora te esté pasando a ti. No siempre tiene que ver con la dirección asistida, pero en muchas ocasiones sí.
Algunas veces esto sucede por cosas tan simples como que los neumáticos tengan poca presión. Esto es fácil de arreglar ya que solo tenemos que comprobar si efectivamente tienen poca presión y después hincharlos con un compresor. También podría darse el caso en el cual los neumáticos estuviesen desalineados, en ese caso tendríamos que llevar el coche al taller.
Cuando es por un fallo en la dirección asistida, hay varias señales aparte de que el volante se ponga rígido. En el caso de la dirección asistida hidráulica podemos escuchar ruidos al mover el volante esto suele indicar que la bomba de dirección hidráulica tiene poco aceite. Puede que encontremos manchas debajo del coche, esto es debido a que hay alguna fuga del líquido de dirección. También podemos tener problemas con la correa del motor, esto lo podemos detectar ya que el volante vibra cuando el coche está al ralentí.
Las direcciones electro-hidráulicas o eléctricas también pueden averiarse. Por ejemplo, pueden tener el cableado dañado, los motores averiados o en el caso de la electro-hidráulica, también puede perder líquido.
¿Necesita mantenimiento la dirección asistida?
Para que no tengamos estos problemas en la dirección asistida es importante que revisemos varias cosas del sistema y que tengamos en cuenta otras:
- Es necesario que vigilemos el estado del aceite y el nivel que hay para que siempre haya suficiente.
- Comprobar la presión de los neumáticos periódicamente también puede ayudarnos.
- No debemos girar el volante durante largos periodos de tiempo a la vez que pisamos el freno.
- Algo con lo que tenemos que tener cuidado para no averiar la dirección asistida es a la hora de realizar giros bruscos, debemos evitarlos o hacerlo solo cuando la situación lo precise.
- Tenemos que revisar el funcionamiento de la cremallera, los amortiguadores y la presión de la bomba hidráulica.
Como vemos, no es un mantenimiento muy complicado de realizar, pero sí que es importante que esté en buen estado ya que puede evitarnos muchos accidentes.
No es que la dirección asistida sea un descubrimiento reciente, de hecho casi todos los coches que vemos por la calle cuentan con ella. Pero sí que podemos decir que cada vez se han ido desarrollando más los sistemas de dirección asistida para que cuando vayamos a conducir un coche sea lo más cómodo posible.
Juan Carlos Lezama