La división Power Systems de Rolls-Royce está ampliando su programa de motores mtu para vehículos militares terrestres, incluyendo un nuevo sistema de propulsión híbrido para requisitos tácticos especiales y una versión de 10 cilindros con más de 1.500 CV de potencia (>1.100 kW) de la exitosa serie mtu 199 utilizada por la OTAN.
Los futuros vehículos militares terrestres blindados requerirán más potencia para la propulsión y el suministro de energía a bordo para los sistemas electrónicos, cada vez más sofisticados y potentes, según explica Knut Müller, vicepresidente senior de Negocios gubernamentales globales en Rolls-Royce Power Systems.
Al mismo tiempo, estarán diseñados para un enfoque táctico diferente en el campo de batalla. Este nuevo propulsor híbrido mtu combina las ventajas de un motor diésel de altas prestaciones con las de un sistema eléctrico puro de batería, ocupando poco espacio en el vehículo y maximizando el volumen disponible para el equipo y la tripulación.
Utilizar este sistema híbrido tiene dos importantes ventajas. Por un lado, permite una operación más silenciosa, esencial en posiciones ocultas, reduciendo el ruido y la huella térmica del motor diésel durante un tiempo más largo. Esto hace que el vehículo sea más difícil de detectar por el enemigo. El modo ‘anti ralentí’ no sólo garantiza un mejor camuflaje, sino que también reduce significativamente el consumo de combustible cuando el vehículo está en modo de espera. Así se optimiza la autonomía del vehículo y la cadena logística posterior para el repostaje.